Si no le conociera, sé que como buen gallego ni sube ni baja, diría que el Presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, está anteponiendo los intereses de su partido político a los intereses de los españoles al no decidir como presidente del Partido Popular quién será su candidato imputado a las europeas de 2014, ni como Presidente de España quién será su candidato imputado defenestrado a las europeas de 2014…
Se puede dar el sonrojante caso de que, aquellos que voten por correo y lo hagan al partido Popular, le den su voto sin saberlo a un delincuente si el señor Rajoy elije mal, porque, al no haber aún candidato, puede ocurrir que salga elegido en diferido un chorizo de cojones…
El señor Rajoy se encuentra en estos momentos a la espera de tomar una importante decisión, tanto más cuanto más se acerca la propia del juez Ruz, que va a concluir la instrucción del caso Partido Popular y puede que vaya a soltar alguna bomba de las del señor Bárcenas, no atómica sino fétida.
Es que no se puede fiar ni de su sombra, si la tuviera, cosa que dudo por cómo actúa, y no puede saber si el candidato que elija lo va a ser desde el centro de reclusión de emprendedores de Soto del Real.
Mala manera de gobernar si no confía de sus propios compañeros de partido.