Las armas de destrucción masiva son con toda probabilidad la máxima expresión de la estupidez humana, de la estulticia de los que las usan y de la falta de genes humanos de aquellos que las proyectan y producen.
Por descontado, yo no estoy capacitado para entender los motivos por los que son usadas, ni las intenciones de los que reniegan de ellas después de haberlas usado.
Armas de destrucción masiva
Existen muchos tipos de armas de destrucción masiva: armas atómicas, químicas, biológicas; y puede que existan algunas cuyos efectos yo no soy capaz de imaginar, aunque, por desgracia, estoy seguro de que pronto sabré de ellas, y espero no llegar a sentirlas nunca, pero las personas que viven en Ucrania sí las van a conocer de cerca: pronto, muy pronto…
Y es que la retirada de las las tropas rusas de las ciudades y pueblos cercanos a Kiev no presagia nada bueno, y, no, tampoco es que me crea que están cogiendo carrerilla, sino, más bien, creo que van a atacar a esas desdichadas poblaciones con lo peor del ingenio asesino ruso: armas de destrucción masiva.
Más tarde dirán que llueve para tranquilidad de todos los tontos que le bailan el agua a ese corrupto, criminal y cobarde, que se llama Vladimir Putin.
¿Ejército ruso o mafiosos bien armados?
Por otra parte, aunque directamente conectadas con la muerte y asesinato de personas inocentes; la corrupción, la mala preparación y la ineficacia del ejército ruso, quedan ensombrecidas por sus propias atrocidades cometidas en algunas ciudades de Ucrania como Bucha o Mariupol – de la que pronto tendremos desagradables y horribles noticias :
Hombres armados, que no soldados, borrachos y llenos de odio, violando a las mujeres indefensas y asesinando y torturando a hombres y mujeres de forma arbitraria y sin sentido, dejando clara la idea de Putin de cómo enviar la ayuda del pueblo ruso a sus hermanos ucranianos.