No sé si me miró bien o mal
Como todos los días, después de mi paseo matutino, gratuito y gratificante, al volver a casa, pasé cerca del metro de Simancas, en la calle Amposta, y me encontré con los yonkis de siempre acompañados, como casi siempre, por dos policías nacionales que les estaban tocando los cojones; supongo. La verdad es que no me … Leer más